Wednesday, November 01, 2006


REGALOS PARA UNA INFANTA

La pregunta que me hice ayer por la mañana nada más levantarme ha sido la siguiente, tan crucial como profunda : "¿qué le regalo a la infanta Leonor para su primer cumpleaños?".

Me hice esa pregunta a pesar de que la familia real hubiera tenido el amable detalle de no invitarme a la merienda en la Zarzuela para que me ahorrara tanto el regalo como la preocupación por no encontrar rastro en mi armario empotrado de la mínima indumentaria a la altura de tal evento mundano.

Es cierto que no es nada fácil saber cómo agradar a una niña que ya tenía por lo menos unos cincuenta sonajeros de plata en su cuña (¿por qué tanta plata? con lo bonito y colorido que son los de Fisher Price). ¿Qué le regala entonces cuando cumple un año? ¿un saxófono de oro? ¿unas cucharas de diamantes? No, qué va, muy vulgares hoy día las cucharas de diamantes, muy de nuevo rico, muy de Victoria Beckam. La familia real ya tiene vajilla de lujo como para invitar a todos los abolengos del planeta Tierra, inclusive las pletóricas dinastias petrolíferas del Golfo Pérsico.

No hubiera sabido con qué detalle obsequiarle a Leonor pero voy a mandarle algo virtual de todas formas (porque me parece mona, muy mona y algo ajena al alboroto mediático que su nacimiento y primeras andaduras por el mundo han provocado).

Voy a mandarle un "VALE POR UNA VIDA LIBRE".

(válido hasta el año 2.105 porque le atribuyo una esperanza de vida de 100 años, una cifra realista dados los avances de la medicina).

Esperemos que Leonor sepa sacarles provecho a sus genes plebeyos (¿genes plebeyos? ¿los hay? cuidado con todo lo que se refiere a una selección por los genes y recuerda los capítulos más negros de la eugenesia), es decir a su sangre normal. Su sangre normal, su sangre roja.

¿Qué le corre en las venas a la pequeña? ¿una mezcla de sangre azul y roja? es decir, ¡dios mío! ¡¡sangre violeta!! Depp Purple!!!

Le corre sangre de un color violeta profundo en las venas, el color republicano por antonomasia. ¿Entendéis ahora el revuelo que se armó cuando la casa real anunció que Felipe iba a casarse con una plebeya?

"¡¡No puede ser!!", se atragantó el carquísimo Jaime Peñafiel, "faltaría más que por culpa de la periodista divorciada nos saliesen infantes rebotados y rojos. "

Rojos, no. Violetas. O del color que se les antoje.

Feliz cumpleaños Leonor.

Sé del color que quieras, de todos los colores que quieras. Sé un arco iris si quieres. El arco iris del cielo, o de la paz, o de la libertad sexual, o de todo a la vez.

Haz de tu vida lo que quieras se cambie o no la ley sálica a raíz de tu nacimiento. No te tomes la corona como una fatalidad sino como una elección propia. Tómate la libertad (por si te apetece, claro) de recorrer el camino inverso al que emprendió tu madre, es decir de salir de la realeza para acercarte al mundo normal, normal sin comillas.

Se me ocurre algo : no dudes en cambiar los Borbones por los Bongos.

Sé Queen of the Bongo si te lo dice el corazón violeta ...

Papa was king of the Borbons, Mamá was queen of the telediario, I'll be the Queen of Bongo, Queen of the Bongo Bong ...

1 comment:

Anonymous said...

Muy bueno Isabelle.

Lo de la sangre violeta me ha gustado :D.