REVELACIONES IRRELEVANTES SOBRE EL PLAN
Los que siguen mi apabullante carrera lo saben: tengo un doble escénico - la novia del monosilábico - que se queja de que siempre se tope con hombres parcos en palabras y ya sabéis: la ficción se nutre de la realidad. De algún especimen (agazapado en mi inconsciente a lo mejor) habré sacado este texto.
Pues va a ser que el mismísimo jefe del gobierno se ha apuntado a mi lista de verborreícos y lo ha hecho a bombo y platillo, lanzando una gran iniciativa destinada a sacar el país de la crisis: el ya famoso plan E.
Plan E('to qué é?), han replicado unos amigos almerienses y murcianos.
No os burléis, no os hagáis los sabihondos. Hemos de reconocer que aún no nos hemos enterado del todo de los pormenores de esta operación de rescate.
Navegando para escribir este post me he topado con una coincidencia espeluznante. Poniendo "plan E" en mi amiguito verborreico - el Google - he encontrado enseguida un grupo de rock finlandés que se llama Plan E y
me he quedado sin palabras cuando he visto el primer título en su myspace: "The selfdestruction button".
¿Será el misterioso plan E una iniciativa satánica para destruir el país?
¿A qué huele el plan E? ¿A espárragos? (los que ya podemos ir a freírnos)
¿A eneldo? ¿A edelweis? ¿A encina? ¿A estiércol?
¿A esperanza? Pero ¿a qué huele la esperanza?
¿A estafa? Pero ¿a qué huele la estafa? ¿A (operación gautequ)e?
Lo que sí sabemos es que la iniciativa es pan comido para los guionistas de los programas cómicos que ya han podido darles rienda suelta a sus dones para la parodia. Anoche casi me caí del sofá cuando vi el sketch que dedicaron al proyecto en el Intermedio.
Para mí el plan huele hoy a Extravío.
Extraviado está el paquete que me mandaron de Barcelona el jueves pasado, día 8, por postal express, y que tendría que haberme llegado al día siguiente. Pero ya sabéis, nevó como nunca el viernes y Barajas permaneció cerrado...
Hoy nos han dicho que el paquete nunca había llegado a Madrid y al remitente le han abierto un Expediente. ¿Qué había en el paquete? ¿Una caja de bombones? ¿Unos libros? No, queridos. No había ni más ni menos que un ordenador portátil...
¿Dónde está mi paquete? ¿En Bombay? ¿En Honolulu?
¿Es otra víctima silenciosa del caos de Iberia? Eso me temo...
Ni siquiera quiero imaginarme lo que pasará cuando Correos reclame a Iberia. Y conocéis el chiste: si hacen la reclamación a través del servicio de atención al cliente de Telefónica, tela... Mejor me acostumbre a la idea de seguir trabajando delante del ordenador fijo...
Lo que me lleva a pensar que el plan E es a lo mejor una iniciativa de José Bono.
Es el plan "E(rque) Ejrpaña va regulín regular".
Algo como:
- Manolo, ¿qué tal la crisis?
- ¿¿ÉÉ?
Eso no es crisis.
- Manolo, ¿qué tal la crisis?
- ¡¡¡ÉÉÉÉÉ!!!
Eso sí es crisis.
Buen plan ¿verdad?
